The Dirty Reiver

The Dirty Reiver es una de las mejores pruebas de Gravel en el Norte de Inglaterra.

¡Pues claro que si! allí que nos proponemos ir con ellos. The Shimano Alliance.

Nerviosa llevo la espera del gran día, y por fin llegó el momento

Todo preparado y a volar…

Una vez en Newcastle me recogen Ben y Erick, para dirigirnos a Kielder

Llegamos a The Forest Kielder, a la feria del Dirty Reiver, en la carpa de Shimano nos vamos reuniendo todos los compañeros.

Estamos felices de vernos y vivir una nueva aventura juntos.

El soporte Mecanico shimano nos preparan las bicis y aprovechando las últimas horas del día nos hacen fotos y vídeos.

Disfrutando de lo bonita que es la zona, abundantes árboles gigantes y al lado una llanura interminable… precioso para disfrutar con nuestras bicis de Gravel.

Foto aquí, foto allá… y risas mientras disfrutamos de un atardecer espectacular en ese paraje…

Llegamos a los apartamentos que están en un lugar único.. al lado de un río lago son unas casas de madera con bonitas vistas Una vez acomodados Kelly y yo nos ponemos a preparar la cena, mientras Robb nos hace compañía.

Cenamos los tres tranquilos y nos vamos al otro apartamento donde están viendo las fotos y planeando el día de mañana..

Pronto a descansar que el despertador suena a las 5:30. Preparo la ropa y comida de mañana para la carrera, último vistazo a mi Zideco, presión de los neumáticos, le paso un trapito para quitarle el polvo de la salida de la tarde y nerviosa perdida me meto en la cama, con la sensación de que no voy a pegar ojo, vuelta aquí, vuelta allí, acabo durmiéndome..

Suena el despertador

Abro los ojos y tengo la misma sensación con la que me dormí, y el cuerpo como si no hubiese descansado.

Los nervios no son buenos. Se esperaba un frío día y en cuanto salí de la habitación y vi el amanecer no dudé en salir a la terraza ¡Dios! ¡Qué frío! (Alguna palabrota también dije) hice una foto y me metí como un rayo..

preparo el desayuno, Robb ya estaba cargando energía, y súper parlanchín, Kelly todavía no se había levantado, me siento a desayunar, mientras intento tranquilizarme y pienso en que va a ir todo genial..

Aparece Bruno para hacernos unos vídeos, entre risas se quitan los nervios..

Terminamos de prepararnos, cargamos bicicletas y a buscar la salida del gran día.

Llegamos allí, y ¡Dios!! ¡Que frío! Casi más que antes y habían pasado casi dos horas… «Esto no es lo mío” pienso..

vamos a la salida y allí se palpan los nervios de los participantes

No veo a Kelly, así que intento meterme en un hueco para salir rápido y buscarla para ir con ella..

3..2..1.. Dan la salida y allá vamos…

Empiezo a pedalear helada, los pies no reaccionan, lo bueno, que la gente va a ritmo tranquilo, voy intentando entrar en calor mientras disfruto del ambiente, oyendo a los participantes dar ánimos cuando adelantan o se les adelanta..

el ambiente es muy diferente a otras carreras de otras disciplinas.

Sigo avanzando y en eso que llegan Ben y Erick

Les pregunto por Kelly, ellos no la han visto, me pongo detrás de ellos hasta que viene un poco de subida que no puedo seguirles.

Desde el km 2 veo a gente parada reparando pinchazos, y es algo que sigo viendo a lo largo del recorrido, me resulta curioso, la verdad que hay bastantes tramos con piedras de esas de punta que hacen pinchar fácilmente, en ese momento miro mis ruedas y me alegro de haber hecho caso a mi Mecanico y haber puesto el mousse a parte de tubelizar las ruedas.

Sigo pensando en encontrar a Kelly no hay cobertura con lo que no puedo llamar ni escribir, mientras intento disfrutar sin agobiarme y disfrutar con las vistas y voy moviendo dedos para ver si consigo sentirlos, así van pasando los km, la gente se para para comer y hacerse fotos, pasan los km y las horas y cada vez es más normal, así que hago lo mismo, veo un una zona donde da un poco el sol y me paro a comer una barrita y beber tranquilamente. Me quito el chaleco que llevaba debajo de la chaqueta, al sol se estaba mucho mejor.

Me pongo en marcha y parece que las mansos empiezan a reaccionar. Aunque el sol dura poco en Inglaterra, sale unos min y vuelve a esconderse, entre eso y los tramos de árboles infinitos pues la sobra es lo que más abunda..

me encantaba ver como al verme sola los participantes me dan conversación, que yo no puedo seguirles, mi inglés es.. es.. bueno, dejémoslo ahí, hi girl! your Cinelli is very beautiful.

Wow your Bike It’s very fast. (En las bajadas) y yo contestaba con una gran sonrisa ¡Ohh yes! Aquí lo de bajar rápido no es lo normal y yo que con el frío solo quería que hubiese un poco de subida.

En una bajada donde al final había un giro las piedras esas tan guays me hacen perder el control y casi acabo en el suelo, casi que no se todavía como lo salvé, pero es que la Cinelli es muy manejable y un movimiento aquí y otro allí la bici recta y un ufff.. ¡Dios! Oigo unos gritos de los chicos que estaban marcando el giro, una vez salvado me hicieron sonreír… digo gritos porque no entendí nada de lo que dijeron..

tienes que bajar más despacio Lorena, “me dije” así que bajé el ritmo y tranquila hasta el avituallamiento km 43. Carpa de Shimano reparando bicis, música, comida a lo grande y todos con una gran sonrisa, allí me encuero a Bruno y a Robb les pregunto por Kelly y me dicen que no ha llegado aún.

Así que allí me espero a que llegue, cuando llega le cuento que creía que estaba delante, y que me alegraba verla. Tras un rato allí nos disponemos a seguir.

Me quedé un poco helada y eso me hizo volver a no sentir manos ni pies y por tramos la cabeza se quedaba como helada y me daba dolor. Me entra un poco de bajón, pero intento animarme viendo donde estoy y la suerte de poder disfrutarlo.

Eso no lo había experimentado nunca, y el tener los pies así de helados toooodo el rato tampoco.

Me resultaba bastante incómodo, me había puesto el chaleco por fuera y del resto del cuerpo estaba bien.

Se empezó a girar aire y habían tramos que parecía no avanzar, aún así era todo muy nuevo y bonito así que con la sonrisa debajo de la braga disfrutando juntas.

Vemos una zona muy chula para foto y paramos a comer algo y a fotografiar a nuestras bicis.

Estando allí llegan Bruno y Robb, Bruno venía a hacernos fotos así que el se adelantaba con el coche y nos esperaba para capturarnos.

Me sentía bien viviendo la fría aventura, al fin llega una zona conocida, el día de antes habíamos estado por allí haciendo fotos, una larga bajada que empiezo a notar rara la rueda delantera, había pinchado, suerte que llevaba el mousse y tubeless así que esperé a llegar abajo para comprobar…

la cubierta estaba bien así que sólo tuve que hinchar.

Al conocer el camino era todo diferente, la meta estaba cerca…

Un abrazo, recogemos la insignia de Finisher

Y a comer, cerveza isotonica que no tiene alcohol pero sabe a birra de la buena. Y nada de pasta, me encantó

Al ratito llega Robb y ya nos quedamos allí disfrutando de la comida y de risas

Es la primera ruta larga que hago con mi Cinelli Zideco y tengo que decir que he llegado más enamorada aún de ella, manejable, ligera, responde muy bien ante cualquier terreno, el grupo Ultegra GX es rápido y suave, apenas notas que estás cambiando, mi elección es doble plato, para poder disfrutar de los llanos y de las subidas más exigentes, el manillar de Pro con los cuernos ligeramente abiertos para un mejor agarre y manejo es ideal para el Gravel, el apoyo es plano con lo que resulta muy cómodo cuando alargas el tiempo en la ruta. Hasta ahora había probado manillar normal y me encanta el cambio.

El Sillín también me resulta muy cómodo y eso que soy bastante delicada con los sillines es el Pro Griffont women, en definitiva estoy segura que viviré grandes y bonitas aventuras con mi pequeña Zideco.

De la carrera destacaría el bonito recorrido, para mi que soy de costa y clima cálido, pues eso, unos 15grados más cómo mínimo, habrían estado muy bien..

La comida post carrera a elegir, opción vegan y postre vegan también, la cerveza isotonica recuperadora con vitaminas y todo lo que aporta una bebida deportiva que además estaba buenísima..

Sin duda, para vivirla aunque sea una vez en la vida.

Esperamos a que llegasen los chicos que estaban en la distancia larga y cuando llegan tras la celebración y el brindis de rigor… salimos de nuevo a hacernos unas fotitos y a descansar…

Experiencia para guardar en la cajita de recuerdos.. esa cajita que de vez en cuando se abre para disfrutar de esa vivencia vivida

North London, gris, pero con un color especial.. entre ese gris del cielo, esos cambios de colores en la tierra, praderas enormes llenas de ovejas pastando, crías que no se separaban de sus madres daban una imagen preciosa que sacaba una sonrisa de ternura y así de la nada habían árboles gigantes bien cuadrados y posicionados que eran un cocktail perfecto para lo sentidos. Cuando el sol asomaba los verdes se intensificaban y ese cocktail se volvía cálido.

 

#ridershimano #sermujerciclista