Somos lo que pensamos

En toda esta vorágine de volver a sentirme yo, de reencontrarme y de empezar a vibrar de nuevo con la bici aparece una señal. Oakley lanza un concurso: bikers vs runners. Un duathlón por equipos en el circuito Montmeló de Barcelona con Mark Márquez, Dani Rovira, Mario Mola y Carlos Coloma y algun@s bikers y runners del momento. ¡¡¡Y allá que voy!!!

Comparto mis fotos con las indicaciones para concursar y cómo no, pensando en lo que me gustaría vivir la experiencia. Llegó el día y ¡zas! Privado de Oakley: <<Has sido una de las seleccionadas, ¡Enhorabuena!>>. ¡Ay la leche! Pienso, flipando de la emoción y la alegría. Una semana queda para el encuentro y los días pasan leeentos.

Martes 13 de junio 5 de la mañana. Nerviosa despierto y tras el ritual mañanero previo a un viaje, nos ponemos en marcha. 600km nos esperan y una gran aventura que seguro guardaré en mi cajita de los buenos recuerdos.

Tras la llegada al circuito, presentaciones, entrega de equipo para la prueba, empezamos a conocernos los participantes. Muchos nervios e ilusión tenemos todos en el equipo de los bikers. Somos bastantes chicas. “Mola”. Nos ponemos en marcha, con nuestra bici y todo preparado. Pequeña reunión de equipos estrategias para intentar ir en grupo y llegar todos juntos. La cuenta atrás comienza. 5,4,3,2,1…

La salida, a fuego. En los primeros metros ya me cuesta mantenerme, me encuentro peleando con las pulsaciones a mil mientras intento disfrutar del circuito. Diferente verlo en directo metro a metro. El asfalto se siente diferente a lo que estoy acostumbrada, las ruedas se cogen muy bien. Qué buena sensación. Aunque con el gancho puesto y sin poder recuperar, seguimos luchando por mantenerme en el grupo.

Me descuelgo, ¡ay dios! Doy dos cabezazos y de repente una mano a mi espalda me dice, <<recupera, vamos>>, y ¡zas! me da un pequeño empujón que me mete de lleno en el grupo. 3’5km. Bufff. Pulsaciones a mil. <<Este ritmo no sé si lo aguanto>> me digo. Entonces llegamos al arco donde marcamos la primera vuelta 7’11”. Vaya ritmo llevamos.

La segunda vuelta es un poco menos rápida y casi nos mantenemos todos. Pasamos la segunda y volvemos a apretar en la tercera vuelta. Aquí ya sabemos que llega la transición, cruzamos la línea, nos bajamos de la bici y nos plantamos las zapas.

Un poco de agua. El calor se hace insoportable y tenemos por delante 5km de carrera. Las piernas como que no reaccionan pero poco a poco se van adaptando.Hay que disfrutar la experiencia así que eso hice.

Genial el recibimiento, tenían todo preparado con un pequeño avituallamiento, fruta cortada, frutos secos, barritas y bebida fresquita nos esperaba. Una vez recuperados para recibir el premio, hemos quedado los segundos. Aunque en la bici llegamos los primeros, los runners en la carrera nos ganaron. Como auténticos profesionales de MotoGP subimos a podium con champaña y todo. Ducha y cocktail para acabar el día de la mejor manera.